El presidente, Shimon Peres, instó a reanudar las conversaciones de paz con los palestinos pero advirtió a la comunidad internacional de que debe presionar al movimiento islamista Hamás para que acepte las tres condiciones básicas, entre ellas el reconocimiento del Estado de Israel.
Tras recibir en Jerusalén a la consejera de Seguridad Nacional de EEUU, Susan Rice, el mandatario expresó su convencimiento de que su homólogo palestino, Mahmud Abbás, sigue comprometido con la solución de los dos estados.
"Todo el mundo estaba de acuerdo en la necesidad de una pausa, pero eso no debe significar un estancamiento. Debemos hallar el camino para reanudar las negociaciones con los palestinos", aseguró Peres.
"Mi percepción es que Abu Mazen (Mahmud Abbás) quiere la paz y no creo que haya cambiado los principios básicos, es decir la solución de los dos estados y la oposición al terrorismo. Es alguien con quien se puede negociar", agregó.
Al hilo de este argumento, Peres subrayó que el acento debe ponerse ahora en presionar al movimiento Hamás para que acepte las reglas del juego.
"Lo que se necesita en este momento es la presión internacional para que Hamás acepte las condiciones básicas impuesta por el Cuarteto de Negociadores" (EEUU, Rusia, la ONU y la UE), afirmó.
"Y creo que Hamás no debe tener otra oportunidad si no ayuda, nadie debe pagar por sus misiles y túneles" bajo la frontera con Egipto, agregó.
En la misma línea, Rice le confirmo el deseo de la Administración Obama de reanudar los esfuerzos de paz y buscar una solución diplomática cimentada en la idea de los dos estados, única que garantiza la seguridad y el futuro de Israel, según EEUU.
La asesora también le transmitió la gratitud del presidente de EEUU y le recordó que este le espera el 25 de junio en la Casa Blanca, en la que será una de sus últimas visitas de Estado antes de abandonar la presidencia semanas después.
Peres también se refirió a otro de los asuntos que han desafinado la habitual armonía entre los dos aliados: la forma de atajar el controvertido programa nuclear iraní.
A este respecto, el presidente insistió en la utilidad de las sanciones y aseguró que el proceso atraviesa un momento fundamental de cara a su resolución.
"Creo que las sanciones son útiles, que el liderazgo iraní no es totalmente honesto pero que no habría actuado como actúa sin las sanciones", aseguró.
"Obama concedió un periodo y ha llegado el momento crítico en el que descubriremos si solo ofrecieron palabras o son serios acerca del cambio. El mundo juzga los hechos, no las palabras" advirtió.
Horas antes, en su encuentro con el primer ministro, Biniamín Netanyahu, Rice ya había indicado que su país aun apuesta por la vía del diálogo.
"Sobre Irán, la embajadora Rice enfatizó la importancia de lograr una solución global que garantice a la comunidad internacional que el objetivo del programa nuclear iraní es exclusivamente pacífico", señaló un comunicado de la delegación estadounidense.
La nota reiteró que "Estados Unidos no permitirá que Irán adquiera un arma nuclear, y que la diplomacia es el mejor camino para hallar una solución pacífica a las preocupaciones de comunidad internacional".
Gran parte de esta comunidad internacional, con EEUU e Israel a la cabeza, acusa a Irán de ocultar, bajo su programa nuclear civil, otro de naturaleza clandestina y fines bélicos cuyo objetivo es adquirir armas atómicas, alegación que Teherán refuta.
Fuente: Aurora Israel y Noticias EFE